Compromiso Ético

Ministerio Cristiano la Trinidad

Preámbulo.

El compromiso ético con la excelencia profesional dentro del Ministerio Cristiano la Trinidad está centrado en la totalidad de los doce principios y valores nucleares del reino de Dios; tal y como los impartió Jesús de Nazaret.

Los principios hacen referencia a las pautas actitudinales que guían el comportamiento del ser humano; fundamentalmente, porque éstos influyen en el proceso de toma de decisiones, y dotan de sentido con propósito las acciones a emprender. En consecuencia,  los principios son premisas integradas en los diversos componentes que estructuran la existencia humana; es decir,  a nivel cognitivo, emocional, espiritual y socio cultural; y, por lo general, se aprenden a través del ciclo vital. Las fuerzas socializadoras que interactúan en el proceso de desarrollo de dichos componentes actitudinales incluyen a la familia, la escuela, la iglesia, las amistades, las experiencias, los medios de comunicación y la tradición cultural.

La educación, desde sus diversas modalidades: formal y no formal, constituye un vehículo eficaz para el desarrollo y afianzamiento de los doce principios del reino de Dios. Estos principios son: el amor, la justicia, la libertad, la paz, la compasión, la humildad, la sabiduría, la paciencia, la fidelidad, la probidad, la beneficencia  y la alegría.

En ese contexto, en una sociedad donde la ciudadanía practique y promocione los valores señalados anteriormente, y éstos se encuentren arraigados en los principios que los guían; será una sociedad en la cual se gestione constantemente un proceso interrelacional dinámico que favorezca un  ambiente conducente a la plenitud y excelencia existencial.

En relación con los valores, se hace referencia a lo que se aprecia, a lo que se le da más ponderación en la vida y, por lo tanto, éstos representan una prioridad para la persona, la familia o la comunidad, y la sociedad. En razón de ello, los valores proveen una estructura para la toma de decisiones y el desarrollo de los proyectos de vida al asistir a la persona o agencia con dirección y sentido de identidad. Los valores tienden a trasmitirse de generación en generación, pero, también se desarrollan gracias a los agentes socializadores que dinamizan la vida en  sociedad; entre esos agentes se encuentra la educación desde sus diversas modalidades. Los procesos educacionales son vías que dan lugar a que  se desarrollen, preserven y se trasmitan los valores o las prioridades existenciales de un ser humano, grupo, agencia o sociedad. Los doce valores nucleares del reino de Dios son: la relación con el Creador, la familia, las amistades, la educación, el autocuidado integral, el trabajo, la determinación personal, la comunidad, el servicio, la estética, el activismo solidario y la patria.

Cada persona natural o jurídica afiliada o conectada al Ministerio Cristiano la Trinidad, se compromete a promover la existencia de instituciones sociales que protejan la dignidad humana y fomenten el desarrollo humano integral. Asimismo, deben garantizar un servicio hacia cada persona de la sociedad para que tenga la oportunidad de satisfacer sus necesidades básicas, aspiracionales y trascendentales mediante la integración y puesta en práctica de las pautas existenciales declaradas por el Ministerio Cristiano.

En tal sentido, la referencia hacia las instituciones sociales es con la finalidad de proveer el ambiente necesario para el desarrollo, florecimiento y despliegue de cada miembro de la ciudadanía. Sobre todo, porque es necesario comprender que de la estructura social— y, con ello, los modelos de convivencia que organizan la interacción cotidiana en las relaciones sociales—, se deriva la organización de las instituciones sociales. Estas instituciones, son el producto de arreglos sociales aceptados y honrados ampliamente por los miembros que conforman la comunidad; y, desde allí, se constituyen los diversos procesos y pautas actitudinales que son considerados vitales para el bienestar colectivo; es, precisamente,  desde esas interrelaciones  del complejo social y de sus instituciones, que se hace posible preservar la continuidad cultural y encausar los cambios sociales.

Una sociedad donde las instituciones sociales se guían por los principios de vida señalados anteriormente; además, se organizan en función de los valores existenciales propuestos, podrá proveer el cultivo ideal para el bienestar integral de la ciudadanía que la compone. Estas instituciones sociales como creaciones del ser humano tienden a reflejar los principios y valores sostenidos por las personas que lideran y ejecutan la voluntad del pueblo. Estos principios y valores se pueden aprender y desarrollar en cada una de las instituciones sociales por medio de las diversas modalidades que tiene la educación: informal,  formal y no formal. Las instituciones tradicionales presentes en la comunidad incluyen la familia, la educación, la iglesia, el sistema de salud, el sistema judicial, el sistema político, el sistema económico, los medios de  entretenimiento,  los medios de comunicación y el sistema militar.

Declaración de Compromiso con la Excelencia Profesional

Con el compromiso de alcanzar la excelencia profesional en el cumplimiento de las funciones laborales y, en concordancia con ello, en razón del delicado oficio de la enseñanza, la predicación, la consejería, el cuidado pastoral, la administración eclesiástica y el liderazgo cristiano; cada persona natural o jurídica afiliada al Ministerio Cristiano la Trinidad, se compromete a relacionarse, convivir y conducirse tomando en consideración los siguientes lineamientos éticos:

  1. Con la ayuda de Dios me comprometo a promover la dignidad humana desde el mismo comienzo de la vida hasta el fin del ciclo vital.
  2. Con la ayuda de Dios trabajaré en la creación de un clima de fe y confianza donde las demás personas puedan crecer y florecer. Para esto estoy consciente de mis fortalezas y de mis limitaciones, por lo tanto, me comprometo a guardar la ley del Estado  y, también a ir más allá, al estar en disposición para abrazar los lineamientos éticos del Ministerio Cristiano la Trinidad.
  3. Con la ayuda de Dios procuraré mantener una condición física, psicológica y espiritual estable y saludable a fin de estar completamente apto para la obra de sanar, enseñar, predicar, guiar, nutrir, sostener y exhortar con amor y compasión a las personas bajo mi servicio y liderazgo. Para esto abrazaré un estilo de vida saludable que incorpore la buena alimentación, el ejercicio físico, la recreación y las buenas relaciones sociales.
  4. Con la ayuda de Dios procuraré llevar a cabo todas mis transacciones—personales y profesionales—con probidad. Esto implica ser genuino para con Dios, las demás personas y conmigo mismo.
  5. Con la ayuda de Dios promocionaré tanto en palabras como en acciones los siguientes doce principios de vida señalados por Jesús de Nazaret: el amor, la justicia, la libertad, la paz, la compasión, la humildad, la sabiduría, la paciencia, la fidelidad, la probidad, la beneficencia, y el gozo. Para esto cultivaré un respeto por mí mismo, por el oficio que represento, por la institución que me da cobertura ministerial, por la comunidad de fe a la cual sirvo y por la sociedad en general.
  6. Con la ayuda de Dios pensaré, actuaré y relacionaré guiado por los siguientes doce valores que representan prioridades existenciales: la relación con el Creador, la familia, las amistades, la educación, el autocuidado integral, el trabajo, la determinación personal, la comunidad, el servicio, la estética, el activismo solidario y la patria.
  7. Con la ayuda de Dios me esforzaré por mantener un excelente cuidado y relación con mi pareja, hijos e hijas y familiares, procurando ser propulsor de calidad marital y familiar.
  8. Con la ayuda de Dios velaré porque mis servicios profesionales y pastorales se fundamenten en los lineamientos de vida señalados en las Sagradas Escrituras, la tradición clínica y pastoral, mis experiencias de vida y los dictámenes de la buena ciencia a fin de promover el bienestar integral de las personas, familias, grupos, instituciones y comunidades donde me toque servir.
  9. Con la ayuda de Dios propiciaré el trabajo interdisciplinario, en un ambiente de compañerismo, compartiendo información, intercambiando saberes, aceptando sugerencias y respetando ideas divergentes; siempre en búsqueda de proveer ayuda integral y asistencia espiritual efectiva a quien la solicita. De allí que, me relacionaré con mis colegas de manera respetuosa promoviendo un convivir solidario, un espíritu de cooperación y la unidad en el servicio a la comunidad.
  10. Con la ayuda de Dios lucharé contra todas las manifestaciones de la maldad: la avaricia, la arrogancia, la crueldad, la agresión, la injusticia, la explotación y la discriminación a fin de promover un convivir y una sociedad más acorde con los principios de vida del reino de Dios.
  11. Con la ayuda de Dios estaré presto a mitigar, transformar o eliminar las condiciones sociales conducentes a la miseria humana tales como: la pobreza extrema, la criminalidad, la inseguridad social, el desempleo, la falta a los servicios de salud, la privación de los servicios básicos, la violación al derecho del debido proceso, la presencia de economías mutiladoras, la corrupción administrativa, la promoción de políticas opresivas, la negación a una buena educación y la intolerancia religiosa.
  12. Con la ayuda de Dios promocionaré los principios de vida del reino de Dios y con denuedo predicaré el Evangelio de las Buenas Nuevas de sanidad y de liberación en el mismo espíritu de Jesús de Nazaret.
  13. Con la ayuda de Dios me convertiré en un instrumento de cambio y agente de paz promoviendo la vida plena en las personas, grupos, familias y comunidades
  14. Con la ayuda de Dios, mientras espero la Bienaventurada Esperanza de la Segunda Venida de Cristo y a fin de relacionarme bien con mis semejantes y el resto de la creación, procuraré llevar una vida que refleje el carácter amoroso y compasivo de Dios.
  15. Con la ayuda de Dios cumpliré mi compromiso laboral con eficiencia dando fe de una sabia mayordomía en el manejo de los recursos humanos, los recursos financieros y los recursos de infraestructura a fin de que mi labor se traduzca en buen rendimiento y en una productividad saludable.
  16. Con la ayuda de Dios limitaré la práctica de mi trabajo ministerial solo a las áreas de mi conocimiento y habilidades para las cuales estoy calificado. Por lo tanto referiré a profesionales calificados las necesidades identificadas que estén más allá de mi competencia profesional o que ameriten la colaboración con otro personal profesional.
  17. Con la ayuda de Dios estableceré linderos claros en mi relación pastoral y profesional con las personas bajo mi liderazgo y responsabilidad evitando relaciones múltiples que puedan comprometer la integridad de la persona y del servicio prestado. De allí que evitaré involucrarme inapropiadamente en la vida de quien recibe mi ayuda profesional y bajo ninguna circunstancia aprovecharme de una situación u oportunidad para satisfacer mis necesidades personales.
  18. Con la ayuda de Dios guardaré fidelidad a las personas bajo mi ministerio y servicio dentro de las limitaciones de las leyes del Estado. De allí que, mantendré la confidencialidad de pensamientos y conductas reveladas por mis feligreses, pacientes o clientes.
  19. Con la ayuda de Dios usaré solo la persuasión cognitiva, afectiva, conductual, gestual y actitudinal como medio para compartir las buenas nuevas de salvación, manejar las situaciones de conflictos y comunicar los principios del reino de Dios. Renuncio a todo deseo de abuso de poder y depongo toda estrategia coercitiva en mis interacciones sociales.
  20. Con la ayuda de Dios me comprometo a seguir un modelo de liderazgo y ministerio de apertura e inclusión alcanzando y sirviendo a la humanidad sin discriminación e imparcialidad por razones de raza, etnicidad, condición económica, color, credo, ideología, cultura, genero, orientación sexual, edad o condición física, motora o intelectual.
  21. Con la ayuda de Dios me comprometo a cuidar el planeta Tierra, la naturaleza, la flora, la fauna y el resto de la creación con respeto y dedicación a fin de promover un convivir ecológico acorde con los principios de vida.
  22. Con la ayuda de Dios estaré siempre atento y dispuesto a mi capacitación profesional, actualizando y perfeccionado mis competencias en el área de mí desempeño, en aras del eficiente cumplimiento de mis tareas y funciones.

Que el Dios Viviente quien nos ha llamado a esta obra sagrada nos dé el poder y la capacidad para llevarla a cabo. Amen.

Textos Bíblicos Guía

“Pero los que tienen la sabiduría que viene de Dios, llevan ante todo una vida pura; y además son pacíficos, bondadosos y dóciles. Son también compasivos, imparciales y sinceros, y hacen el bien” (Santiago 3:17, DHH).

“Manténganse listos, con la ropa bien ajustada y la luz encendida. Pórtense como personas  que esperan a que regrese el jefe de un banquete de bodas, para abrirle la puerta tan pronto como él llegue y toque… Sí, dichosos las personas a quienes su jefe encuentre preparados, aunque llegue a la medianoche o de madrugada…  Así también ustedes estén listos, porque el Hijo del hombre vendrá a la hora menos pensada” (Lucas 12:35, 38, 40).

“Así también ustedes, cuando hayan hecho todo lo que se les ha mandado, deben decir: “Somos trabajadores corrientes; no hemos hecho más que cumplir con nuestro deber” (Lucas 17:20).

Las leyes del Estado, las cuales estamos obligados a guardar, representan la mínima expectativa conductual para la sociedad. La ética, por su lado es una invitación voluntaria a ir más allá del deber, a vivir comprometidos con la excelencia existencial.

Acerca del Ministerio Cristiano la Trinidad

El Ministerio Cristiano la Trinidad es una asociación civil sin fines de lucro de carácter religioso e interdenominacional constituida con la intención de proveer a toda persona, sin distinción de ningún tipo, servicios múltiples e integrales (religiosos, sociales y psicológicos) conducentes al desarrollo y despliegue del potencial humano.

Esta asociación es un ministerio en el sentido de que ha sido creada con el fin de servir a las personas de toda lengua, etnia, nacionalidad, color, edad, género, orientación sexual, credo, ideología, condición social, educación o capacidad física, motora o intelectual. Este servicio se presta a través de muchos medios que incluyen el pastorado, la capellanía, la educación, la consejería profesional, la investigación social, y los servicios de cuidados paliativos. Esta asociación es cristiana en el sentido de que está basada en las enseñanzas y acciones de Jesús de Nazaret quien vivió para servir y para dar vida. Su mensaje renovador y liberador es la base y el fundamento doctrinal de esta institución. Esta asociación es una comunidad imitando así la comunidad de Dios: la Trinidad. El seguir el modelo de vida de Dios implica vivir en comunidad valorando los principios de cooperación, solidaridad, mutualidad y responsabilidad. Hablar de Dios es hablar de la Trinidad. Hablar de Dios es hablar de relaciones de iguales donde lo central no es la jerarquía sino el amor y el servicio incondicional. En esta comunidad de iguales las personas siempre son más importantes que las instituciones.

 

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